"Dejamos todo atrás": Ayuda a las personas afectadas por la violencia y la pandemia en Yemen

Cuando el implacable conflicto de Yemen llegó a la ciudad de Taizz, Ashwaq vio cómo su vecindario se desmoronaba. En medio de los bombardeos, su casa se incendió. Ella, su esposo y sus cuatro hijos — incluido un hijo que es paralítico— huyeron para salvar sus vidas.
Cuando llegaron a Saná, la capital de Yemen, Ashwaq descubrió que la afluencia de personas desplazadas había provocado que los alquileres se dispararan. No podía pagar ni siquiera los alojamientos más básicos.
Su familia encontró refugio temporal con un pariente. "No había espacio suficiente para nosotros seis", recordó. "Nos apretujamos todos en una sola cama. En dos semanas buscamos de nuevo una casa. Tuvimos la suerte de encontrar una habitación y un baño como intercambio por cuidar de una casa más grande. Sin embargo, pronto nos dimos cuenta de que nos estábamos quedando sin dinero para comprar medicinas y productos básicos cotidianos para nuestro hijo paralizado".
Trágicamente, Ashwaq es solo una de las más de 3,6 millones de personas que han sido desplazadas.
La crisis en Yemen comenzó en 2015 y ha dejado al 80% de la población necesitando ayuda humanitaria urgente.
Justo a tiempo
Ashwaq y su familia recibieron apoyo después de que un vecino los dirigiera a un centro de ayuda local. Allí, se estaban distribuyendo alimentos de emergencia y suministros de higiene gracias a la colaboración del UNFPA, UNICEF y el Programa Mundial de Alimentos (PMA). La colaboración distribuye dichos suministros dentro de las 72 horas posteriores al desplazamiento de las personas de sus hogares.
Desde junio de 2018 — este esfuerzo, llamado Mecanismo de Respuesta Rápida (Rapid Response Mechanism, en inglés) — ha llegado a más de 2,5 millones de personas desplazadas con ayuda de emergencia, en prácticamente todos los distritos del país.

"Podemos sustentarnos con los alimentos y artículos esenciales que trae este paquete de socorro", aseguró Ashwaq. "Mi único deseo ahora es encontrar tratamiento para mi hijo".
COVID-19 se suma a la crisis
Este año, una crisis humanitaria ya espinosa se ha vuelto aún más desafiante debido a COVID-19. Incluso antes de que estallara la pandemia, el conflicto en Yemen implicó que el sistema de salud del país estaba funcionado al 50% de su capacidad normal. La desnutrición crónica ha dejado a los yemeníes vulnerables, su sistema inmunológico debilitado es un blanco principal para el coronavirus.
Las agencias de la ONU han intensificado su respuesta de emergencia ante la pandemia. A principios de este año, durante una fase crítica de la pandemia, llegó a Yemen un avión que transportaba un total de 43 toneladas de suministros de laboratorio, ventiladores, kits de prueba, máquinas de reacción en cadena de la polimerasa (polymerase chain reaction, PCR, en inglés) y equipo de protección personal (EPP) vital. El envío fue una donación a la Organización Mundial de la Salud (OMS) facilitada por la Fundación Hayel Saeed Anam en nombre de la Iniciativa Internacional sobre COVID-19 en Yemen (International Initiative on COVID-19 in Yemen, IICY, en inglés), una asociación de empresas multinacionales y las Naciones Unidas. La entrega en Yemen fue gestionada por el PMA, y desde allí, las agencias de la ONU distribuyeron los suministros a hospitales y laboratorios de todo el país.
“Esta donación ayudará a llenar las brechas de suministro en los hospitales y laboratorios de Yemen”, dice el Sr. Auke Lootsma, Representante Residente del PNUD en Yemen. “Este es un ejemplo de cómo la ONU y sus asociados pueden trabajar juntos para enfrentar amenazas humanitarias”.
La pandemia ha llamado la atención del mundo, pero no es la única enfermedad que pone en riesgo a los yemeníes. “Sabemos que COVID-19 es una amenaza muy real y peligrosa. Pero si nos enfocamos solo en este virus, perdemos de vista a otros quienes están muriendo de enfermedades que no son COVID-19, y no podemos dejarlos atrás”, dice el Dr. Muhammad Fawad Khan, Coordinador del Grupo de Salud de la ONU en Yemen.
El enfoque de gestión por grupos (Cluster Approach, en inglés) es la forma en que la ONU responde a las emergencias a nivel mundial. En Yemen, el Grupo de Salud (Health Cluster en inglés) incluye agencias de la ONU y ONG locales e internacionales. Los asociados dividen la respuesta en cuadrículas en un mapa, para que puedan satisfacer las necesidades humanitarias de manera sistemática.
Aunque las agencias de la ONU tienden a atender las necesidades de emergencia, están trabajando en soluciones a largo plazo para garantizar la salud, el bienestar y la dignidad de las personas desplazadas en Yemen.
En esto, tienen en cuenta los deseos de las personas a las que sirven, como Zahrah Mohammed Hassan, de 18 años, quien dice: “Dejamos todo atrás. Deseo tener días hermosos como antes y volver a casa con mi hijo. Deseo vivir en paz y no tener más guerras”.
Producido por ONU Yemen. Escrito por el UNFPA y la OMS en Yemen, con el apoyo editorial de Paul VanDeCarr, Oficina de Coordinación del Desarrollo. Para obtener más información, visite: https://yemen.un.org/.
















