Preservar los logros, reconstruir la confianza: Togo no se arriesga con la polio
Cuando Angèle, vendedora de 28 años y madre soltera de Togo, se enteró de que su hijo de 5 años había sido vacunado contra la poliomielitis en la escuela en febrero, fue inmediatamente a expresar su descontento.
"Cuando volvía a casa del mercado me enteré de que habían vacunado a mi hijo contra la poliomielitis sin mi consentimiento", gritó, muy alterada, antes de lanzar una amenaza: "Se lo advierto. Si le pasa algo, los perseguiré hasta el final de mi vida".
La protesta de la jóven fue tan dramática que la escena fue filmada por un testigo y compartida en las redes sociales, donde el vídeo se hizo viral.
¿La razón detrás de la profunda indignación de esta madre? Una campaña de puesta al día de la vacunación contra la poliomielitis organizada en febrero de 2022 por el Gobierno de Togo para niños y niñas de 3 a 6 años en respuesta a nuevos casos del poliovirus salvaje en 2021.
Antes de este recrudecimiento de los casos, el país había sido declarado libre de esta forma particular de poliovirus en 2007—un gran avance que fue posible gracias a la vacunación contra la polio, una enfermedad grave y altamente contagiosa que puede causar parálisis de las extremidades inferiores y de los músculos respiratorios, lo que conduce a la muerte o a graves secuelas irreversibles.
Consciente del peligro, otra mujer, Habiba, de 30 años, llevó a su hijo de 5 años al centro de vacunación el pasado mes de febrero.
"Es importante que reciba todas las vacunas. Desde que nació, he intentado llevarlo a todas las citas de vacunación obligatorias y no se ha muerto por ninguna de ellas. Así que creo que las vacunas son útiles", explicó, antes de referirse a un hombre de su pueblo que a menudo se sienta en la intemperie, en plena calle. "Nuestros padres dicen que él era normal de pequeño y que fue la polio [la que le hizo eso]. No quiero eso para mi hijo".
Cómo la información errónea sobre las vacunas puede poner en peligro la salud de los niños y niñas
Muchos padres y madres en Togo, como ocurre también en otros lugares, no siempre consideran importante vacunar a sus niños y niñas contra la polio.
Al igual que otras vacunas que se han utilizado durante décadas - como las del tétanos, la difteria, el sarampión, la tos ferina o la fiebre amarilla - la vacuna contra la poliomielitis se ve afectada negativamente por la creciente desconfianza en las vacunas contra la COVID-19 desde hace aproximadamente un año.
Aunque la vacuna contra la poliomielitis ha demostrado ser segura y eficaz durante décadas, y ha salvado millones de vidas en todo el mundo, muchos padres y madres de Togo, y de otros países, cuestionan ahora su seguridad e incluso dudan de sus beneficios, y estos interrogantes se extienden a otras vacunas que ya son condieradas "clásicas". Las reacciones de la gente son a veces viscerales, como la de Angèle, y reflejan un temor que, aunque real, carece de fundamento científico y eclipsa los riesgos bien documentados a los que se exponen los niños y niñas no vacunados.
¿Son seguras? ¿Tendrán efectos adversos a largo plazo? ¿Son realmente indispensables? ¿No podemos proteger a nuestros niños y niñas con procedimientos naturales? ¿Hay otras sustancias en las vacunas? Los padres y madres de Togo, al igual que los de otros países, tienen a veces dificultades para encontrar respuestas claras, definitivas y creíbles a este tipo de preguntas.
Desconfianza en las autoridades sanitarias y en los medios de comunicación
Las razones de esta desconfianza son varias, dependiendo del contexto geográfico, político y social.
En muchos países existe una creciente desconfianza hacia los funcionarios públicos y las autoridades sanitarias en particular. En los países en los que las instituciones garantizan el derecho a la información y la libertad de prensa, los principales medios de comunicación, ya sean públicos o privados, son cada vez más cuestionados.
En los países donde la legislación sobre el derecho a la información es inexistente o no se aplica plenamente, los medios de comunicación no siempre son libres de informar al público sobre cuestiones de interés general, lo que provoca una falta de información. En ambos casos, los ciudadanos confían cada vez más en Internet, especialmente en los medios sociales, para obtener la información que buscan.
Los medios sociales se han convertido en un transmisor alternativo de información. Compensan la falta de acceso o de confianza en fuentes de información como los medios de comunicación convencionales. Sin embargo, también permiten que cualquiera asuma el papel de "periodista" y difunda potencialmente rumores, creencias, mitos e incluso noticias falsas que pueden tener efectos perjudiciales para las personas, potencialmente a gran escala.
Las noticias falsas no son un fenómeno nuevo. Precedieron a la llegada de la sociedad de la información, pero Internet las amplificó hasta alcanzar proporciones sin precedentes.
En 2018, la UNESCO publicó un manual, titulado Periodismo, noticias falsas y desinformación: manual para la educación y la capacitación en periodismo, que aborda, entre otras cuestiones, las trampas de la desinformación contemporánea y la autorregulación de los medios sociales.
La "infodemia" de la COVID-19 y la desconfianza de la gente en las vacunas "clásicas"
En el contexto específico de la pandemia de la COVID-19, la primera pandemia desde la aparición de los medios sociales de comunicación, la OMS ha calificado de "infodemia" a la difusión de información incorrecta y falsa, y las Naciones Unidas en su conjunto lanzaron la campaña mundial Verificado para contrarrestar este fenómeno.
La infodemia de la COVID-19 ha llevado a un gran número de personas de todo el mundo a desconfiar de las vacunas contra la COVID-19, una desconfianza que también ha afectado a la confianza en las vacunas "clásicas", hasta el punto que las campañas de vacunación rutinarias, especialmente en los países del África subsahariana, han llegado a equipararse a las campañas de vacunación contra la COVID-19.
Elias, un trabajador sanitario de unos 30 años que participó en la campaña de puesta al día de la vacunación contra la poliomielitis en Togo, conoce bien este problema.
"Con la actual crisis de la COVID y la polémica que rodea a las campañas de vacunación, no es fácil llevar a cabo esta campaña [...]. Pero tenemos que convencer a los padres y madres para evitar que los niños y niñas queden discapacitados el día de mañana como consecuencia de este brote de poliomielitis", dijo.
Preocupada por la resistencia o la negativa de muchos padres a vacunar a sus hijos, la Representante Residente Adjunta de UNICEF en Togo, Fosca Giulidori, instó a los padres cuyos niños y niñas no han sido vacunados contra la poliomielitis a aprovechar la campaña de vacunación de recuperación de febrero para dar el salto por el bien de sus hijos. "Cuando tengamos la oportunidad de proteger a nuestros niños y niñas de una enfermedad prevenible por vacunación, no lo dudemos", dijo.
Por su parte, la Dra. Diallo Fatoumata Binta Tidiane, representante de la OMS en Togo, dijo: "Esta campaña de vacunación pretende erradicar completamente la poliomielitis en Togo y en todo el mundo. Por lo tanto, podemos tranquilizarles sobre la eficacia de esta vacuna y de todas las demás vacunas aprobadas por la OMS."
La infodemia de la COVID-19 también ha afectado otras campañas de vacunación contra la poliomielitis en todo el mundo. Para hacer frente a este reto, las autoridades sanitarias realizan importantes esfuerzos de educación y comunicación para preservar los logros de la inmunización y recuperar la confianza de la población en las vacunas que salvan vidas, como la de la poliomielitis. Las entidades de las Naciones Unidas siguen apoyando a Togo para ayudar al país a alcanzar estos objetivos.
Al igual que las anteriores campañas de vacunación rutinaria, la campaña de puesta al día de la vacunación contra la polio de febrero de 2022 fue dirigida por el Gobierno de Togo con el apoyo de la OMS, UNICEF y Gavi, la Alianza para las Vacunas. En el proceso se vacunaron 599.735 niños y niñas. La campaña se llevó a cabo en el marco de la Estrategia 2022-2026 de la Iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis, gracias a la cual el mundo nunca ha estado tan cerca de erradicar la poliomielitis.
Escrito originalmente en francés por la Oficina de Coordinación del Desarrollo de las Naciones Unidas con aportaciones del equipo de las Naciones Unidas en Togo y de la Oficina de la OMS en Togo.
Para saber más sobre el trabajo de las Naciones Unidas en Togo, visite Togo.UN.org.