Informe anual de resultados de las Naciones Unidas en el país para el Reino de Bahrein, 2020
El 2020 fue un año extremadamente difícil. Lo que comenzó como una crisis sanitaria que costó millones de vidas se convirtió en una crisis socioeconómica en toda regla que reclamó, en todo el mundo, millones más de los medios de vida. La COVID-19 puso al mundo de rodillas, exponiendo y exacerbando las vulnerabilidades existentes, las cuales probablemente permanecerán durante algún tiempo. Específicamente en el Reino de Bahrein, ha habido más de 120.000 casos de COVID-19 y más de 450 muertes registradas desde que se notificaron los primeros casos en febrero de 2020. En el frente económico, el crecimiento en 2020 se estima en -5,4 por ciento, y sectores como viajes y hospitalidad, son algunos de los más afectados en la región. Sin embargo, estas estadísticas solo cuentan un lado de la historia.
Gracias a su preparación temprana y su estrecha colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Ministerio de Salud y el Grupo de Tareas Nacional para Combatir el Coronavirus pudieron mitigar los peores efectos de la COVID-19. Bajo la dirección del Ministerio de Finanzas y Economía Nacional, se implementaron medidas socioeconómicas cruciales y paquetes de estímulo económico para proteger a los hogares y las empresas contra el impacto de la pandemia. A fines de marzo de 2021, los primeros signos de recuperación económica son evidentes y Bahrein ha vacunado a más de 500,000 ciudadanos y residentes, lo que lo convierte en uno de los líderes mundiales (per cápita) en el lanzamiento de la vacuna contra la COVID-19.
El informe demuestra que las Naciones Unidas no escatimaron esfuerzos para reposicionar rápidamente su apoyo detrás de los esfuerzos de respuesta y recuperación de Bahrein. Al tiempo que la ONU garantizaba el asesoramiento y la asistencia técnica de la OMS al gobierno para hacer frente a los desafíos de la crisis sanitaria, el equipo de las Naciones Unidas en el país desarrolló el Marco de la ONU para la respuesta socioeconómica inmediata ante la COVID-19, una iniciativa de todo el sistema ofreciendo servicios de apoyo multidimensional para responder y recuperarse del impacto de la pandemia. A pesar de las interrupciones causadas por la COVID-19, se lograron avances en varias áreas clave relacionadas con el trabajo de la ONU en derechos humanos, trabajo y migración, sanidad pública, desarrollo urbano sostenible, medio ambiente y seguridad alimentaria, por nombrar solo algunos sectores.