No dejar a ningún refugiado atrás: La ONU está intensificando sus esfuerzos para ayudar a los refugiados centroafricanos que llegan a Camerún
Sentado en el bar de un hotel en Garoua-Boulaï, una pequeña ciudad del este del Camerún en la frontera con la República Centroafricana, un hombre de mediana edad hace una serie de llamadas telefónicas. Hace unas semanas, era un candidato en las elecciones legislativas de la ciudad centroafricana de Bouar.
Pero las incursiones de los insurgentes y la violencia pusieron fin a su campaña. Junto con muchos otros habitantes de su ciudad, entre ellos agricultores, comerciantes y oficiales públicos, tuvo que huir en dirección a Camerún.
Aunque la mayoría ha huido a la República Democrática del Congo, casi 5.000 refugiados decidieron cruzar el monte para llegar al vecino Camerún, evitando la carretera y los grupos armados. Miles más han buscado seguridad en Chad y en la República del Congo.
“Ahora estoy varado. La carretera está bloqueada”, explica el hombre*, que ahora busca un vuelo de regreso a Bangui, la capital de la República Centroafricana.
Desde hace varias semanas, no hay tráfico en esta carretera, la carretera principal entre Douala, en Camerún, y Bangui—como lo demuestran las decenas de camiones de carga estacionados en el lado camerunés de la carretera.
Un viaje peligroso y agotador sin certeza de supervivencia
Entre los refugiados recién llegados a Garoua-Boulaï se encuentra Gnindou Melina, quien logró registrarse con ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados; después de haber caminado 60 kilómetros desde Baboua en el oeste de la República Centroafricana con su joven familia.
“Desde el 19 de diciembre empezamos a ver taxis que huían de Gallo (a 40 kilómetros de distancia), nos dijeron que los rebeldes se dirigían a Baboua. Salimos el 21 de diciembre a pie con los niños”, dice. “Tuvimos que caminar porque ya no había más taxis informales. Caminamos, caminamos, caminamos hasta Garoua-Boulaï”.
Ahora, a Melina le cuesta imaginar el regreso a su país y dice que está dispuesta a ir a cualquier parte, siempre y cuando ella y su familia puedan vivir en paz.
Trabajando juntos para garantizar que los refugiados tengan acceso a recursos vitales
El campamento de refugiados de Gado, ubicado a 30 minutos en carro de la frontera, ya alberga a más de 26.000 refugiados centroafricanos que huyeron de la anterior situación de violencia, en 2014. Equipos de carpinteros están trabajando para construir 300 alojamientos de emergencia para albergar a algunos de los recién llegados. Otros tendrán que encontrar albergue en las comunidades locales.
“Tengo muchos hijos. No tengo dinero, ¿con qué voy a pagar una renta? Prefiero ir a Gado. ¿Encontraremos alojamiento en Gado? ¿Qué comeremos? No lo sé, no lo sé. Aquí encontrar comida es un poco difícil con los niños”, dice Josephine Oumarou, quien también huyó de los combates en Bouar.
Maurice Moussouravi, jefe de la oficina de ACNUR en Meiganga, que gestiona el campamento de Gado, dice que la situación es manejable por ahora:
“Con el apoyo de nuestros socios, podemos hacer frente a estas llegadas y ofrecer albergue, comida y cuidados a quienes lo necesitan. Sin embargo, si la afluencia continúa, junto a las autoridades camerunesas dirigiremos a las personas refugiadas a los lugares más adecuados para que reciban atención y sobre todo estén seguros”.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) también están apoyando al ACNUR en su respuesta a esta nueva emergencia.
“Pero los recursos siguen siendo limitados y necesitaremos toda la buena voluntad para seguir ayudando a los recién llegados, si es que la afluencia aumenta”, dijo Moussouravi.
Con el apoyo de sus aliados, el PMA ya ha proporcionado alrededor de 20 toneladas métricas de alimentos como arroz, frijoles y aceite vegetal, para que los refugiados puedan preparar sus propias comidas e instalarse. Por su parte, UNICEF está trabajando para brindar a los niños asistencia vital, incluido el acceso seguro al agua, el saneamiento y la higiene (Agua, Saneamiento e Higiene para Todos, Water, Sanitation and Hygiene for All, WASH), la educación, la nutrición y la protección infantil.
*No se revela su identidad por razones de protección.
Producido originalmente por UNHCR. Escrito por Xavier Bourgeois, oficial de información pública / portavoz, ACNUR. Publicado en inglés, francés y español en el sitio web de la ONU en Camerún. Para obtener más información sobre el trabajo del Equipo de País de las Naciones Unidas en Camerún, visite: https://cameroon.un.org/en (disponible en inglés y francés).