En Myanmar, el cierre de COVID-19 ha puesto al descubierto la estigmatización, la discriminación y el acoso que enfrentan muchas personas LGBTQI, particularmente en las áreas rurales. Las Naciones Unidas están trabajando para apoyar a esas personas.
Los expertos dicen que la clave es empoderar a los miembros de la comunidad para que deliberen sobre cómo sus prácticas se relacionan con sus propios valores, los cuales están profundamente arraigados.