Todas las manos a la obra en Sierra Leona: la respuesta a COVID-19 necesita, también, a las mujeres líderes

“COVID-19 supone una situación dinámica y fluida”, dice la teniente Matilda Mattu Moiwo. “No se puede predecir todo lo que ocurrirá de antemano”. 

La teniente Moiwo es un oficial de estado mayor de las Fuerzas Armadas de la República de Sierra Leona. Su entrenamiento militar le sirve bien en la lucha contra COVID-19. 

Como Coordinadora Nacional de Referencia de los Servicios Médicos de Emergencia en la ciudad capital de Freetown, la Teniente Moiwo tiene que hacer malabarismos con los servicios nacionales de ambulancia, los médicos en los hospitales, los centros de tratamiento y las unidades de aislamiento, y la asistencia psicosocial para los pacientes y sus familias. También difunde los resultados de las pruebas y actualiza una base de datos nacional sobre COVID-19. 

La teniente Moiwo se mantiene conscientemente a pesar de las crecientes demandas de su equipo desde que se detectó el primer caso de COVID-19 en el país de África occidental, en marzo de 2020. 

Ella recuerda un caso particular de COVID-19, donde una mujer embarazada a término necesitó una cesárea.

“Para esta mujer, no se trataba solo de tener un parto seguro. Este fue el primer parto de un paciente con coronavirus en Sierra Leona. Los trabajadores sanitarios de la unidad de aislamiento estaban preocupados. También lo estaba la paciente”. 

Tomó una hora o más gestionar los elementos necesarios para un parto seguro, pero al final, el trabajo duro valió la pena y la mujer dio a luz a una niña. 

Casos como estos requieren pensamiento creativo, dice la teniente Moiwo. “Es fundamental llevar a los pacientes correctos a los lugares correctos porque nosotros ofrecemos diferentes centros de tratamiento con diferentes niveles de atención, según la gravedad”, dice ella. 

Construir el liderazgo de la mujer es parte de los esfuerzos del gobierno para promover la igualdad de género en todos los ámbitos de la vida. Tales medidas incluyen una nueva ley sobre delitos sexuales, el lanzamiento de centros de ventanilla única sobre violencia sexual y de género, y la declaración, por parte del gobierno en 2019, de la violación y la violencia sexual como emergencia nacional. 

Todos estos esfuerzos cuentan con el apoyo del equipo de las Naciones Unidas en el país en Sierra Leona. Y, como dice el Coordinador Residente de la ONU, Babatunde Ahonsi, apoyar la igualdad de género también significa apoyar la lucha contra COVID-19. 

“COVID-19 es una situación de todas las manos a la obra”, dice Ahonsi.

“Si se impide que las mujeres ocupen puestos de liderazgo, entonces lucharemos contra la pandemia con una mano atada a la espalda. Cuando las mujeres son sometidas a violencia sexual, entonces hay mucha menos energía y recursos para promover la salud pública”. 

La ecuación funciona en ambos sentidos. Así como la igualdad de género respalda la salud pública, la salud pública puede respaldar la igualdad de género—si se le presta la atención adecuada. 

Es por eso que el equipo de las Naciones Unidas en el país trabaja tanto en la igualdad de género como en COVID-19—y se asegura de que los dos vayan de la mano. 

Por ejemplo, Ahonsi lideró un esfuerzo para asegurar la donación de 100.000 mascarillas de China para el Ministerio de Salud y Saneamiento de Sierra Leona. 

UNICEF se acercó a 50 personas influyentes en la salud, incluidas mujeres líderes, que abogaron por el uso adecuado de máscaras, el lavado de manos y el distanciamiento físico. 

La Organización Mundial de la Salud brindó apoyo técnico al gobierno y las instalaciones de salud, que incluyen el Centro Nacional de Respuesta a Emergencias COVID-19, donde la Tte. Moiwo es líder. 

“Cuando progresamos en la igualdad de género, progresamos en todas las áreas del esfuerzo humano”, dice Ahonsi. 

La teniente Moiwo pone en práctica esa noción todos los días en el trabajo. Ella cree que, al ascender como líder, está ayudando a desmantelar la discriminación contra las mujeres. 

“En esta época, cuando la Organización Mundial del Comercio (OMC) está dirigida por una mujer, las mujeres jueces nombradas para la Corte Penal Internacional, las mujeres que sirven como combatientes en las fuerzas armadas y las mujeres que sirven como presentadoras de noticias en los principales medios de comunicación, es lamentable que alguien siga relegando a las mujeres a ciertos rincones”.