Inicio del despliegue: En Kenya, los trabajadores sanitarios de primera línea son los primeros en recibir la vacuna
A pesar del dolor en el brazo, Jemimah Katama, quien trabaja como enfermera en Kenya, está encantada de haber recibido la vacuna contra la COVID-19.
Como coordinadora principal del departamento de Prevención y Control de Infecciones del Hospital nacional Kenyatta, ella sabe mejor que la mayoría lo importante que puede ser la inmunización.
“Mi decisión de ponerme la vacuna hoy es para darles a otros la confianza de que es segura”, dice Katama.
Fue una de las primeras en recibir una de las más de un millón de dosis de la vacuna adquiridas y distribuidas en Kenya por UNICEF como parte del mecanismo COVAX.
El mecanismo COVAX es una iniciativa global lanzada por la Organización Mundial de la Salud, la Comisión Europea y Francia, en abril pasado, para garantizar que los diagnósticos, tratamientos y vacunas contra la COVID-19 lleguen al mundo en desarrollo.
Coordinado por GAVI, la Alianza para las Vacunas, la coalición para la Promoción de Innovaciones en pro de la Preparación ante Epidemias (CEPI) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), el mecanismo COVAX apoya la investigación, el desarrollo y la fabricación de vacunas contra la COVID-19.
Todos los países participantes, independientemente de sus niveles de ingresos, tienen el mismo acceso a las vacunas, una vez que las mismas están desarrolladas.
Katama fue una de los 110 trabajadores de la salud que fueron vacunados en el hospital el primer día. Ahora, tendrá que esperar ocho semanas para su segunda inyección.
Ella recordó que había querido vacunarse lo antes posible, pero al principio su familia estaba preocupada. Sin embargo, después de conversarlo, estuvieron de acuerdo en que vacunarse era una buena idea.
“Mi familia me ha apoyado mucho porque entienden que soy un trabajador de salud de primera línea. Ahora ellos no ven el momento de que llegue su turno.”
El director ejecutivo del Hospital Nacional Kenyatta, el Dr. Evanson Kamuri, quien también recibió la vacuna, dijo que era un día histórico.
“En el último año, COVID-19 cambió nuestro mundo, incluida la forma en que trabajamos”, dice el Dr. Kamuri.
“Mi determinación de vencer al virus es aún más fuerte ahora. La vacuna es una herramienta adicional para acompañarnos a través de esta fase actual”.
El director general interino de salud, Patrick Amoth fue el primero en recibir la vacuna. El director ejecutivo del Hospital Nacional Kenyatta, el Dr. Evanson Kamuri, hizo lo mismo, en un ejercicio en el que alrededor de 110 trabajadores de la salud recibieron la vacuna que les salvó la vida.
El Dr. Stephen Jackson, Coordinador Residente de las Naciones Unidas, describió el “momento histórico y conmovedor” cuando los primeros trabajadores de la salud de primera línea recibieron sus vacunas. “Permítanme asegurarles a todos los kenianos que tengo absoluta confianza en la seguridad de la vacuna y en su urgencia, su importancia y su necesidad”, destacó.
El Dr. Jackson agradeció a los donantes, incluidos los Estados Unidos, Japón, Arabia Saudita, la Unión Europea, Canadá y el Reino Unido, además de fundaciones y empresas, incluida la Fundación Bill and Melinda Gates, que han apoyado al mecanismo COVAX.
Citó un proverbio swahili, "baada ya dhiki, faraja" (después de las dificultades, llega el alivio, en español), para simbolizar el alivio que trajo la llegada de la vacuna contra la COVID-19 en Kenya. Sin embargo, instó a todos a seguir en alerta respecto a respetar el distanciamiento social, usar las mascarillas, y lavar y desinfectar las manos.
“Si bien estamos viendo algo de luz al final del túnel, aún no estamos cerca de salir de él. No debemos bajar la guardia”, dijo el Dr. Jackson en el evento oficiado por la secretaria permanente del Ministerio de Salud, Susan Mochache.
El representante de país de la Organización Mundial de la Salud, el Dr. Rudi Eggers, hizo un llamamiento a favor de la aceptación de la vacuna y agregó que había pasado la prueba de seguridad.
“La vacuna producida por el Serum Institute of India ha sido revisada y es considerada segura no solo por la propia OMS, sino por varias estrictas autoridades reguladoras, incluida la FDA de los Estados Unidos y la correspondiente autoridad reguladora europea. Además, ya se han administrado muchos millones de estas vacunas en todo el mundo y no se han recibido señales de seguridad adicionales. Entonces, seamos claros, ¡estas vacunas son seguras!”, dijo el Dr. Eggers.
Nota Importante: El audio y los subtítulos del video insertado en esta nota están disponibles en inglés.
Producido por UNICEF. Publicado originalmente en inglés en el sitio web de UNICEF. Traducido al español por la Oficina de Coordinación del Desarrollo.