La ONU se asocia con músicos costarricenses para reducir infecciones
Julio Nájera, reconocido cantante de reggae en Costa Rica, afina su guitarra, agita rápidamente los dedos y ajusta un par de cuerdas. Se siente la adrenalina en el aire: el concierto que está a punto de empezar.
Él hace una prueba de sonido, moviendo algunas perillas en la consola. Julio es muy detallista y siempre quiere que todo salga perfecto, aunque sea en el último momento. Ha colocado su teléfono celular en el trípode con el cuidado de lograr el encuadre correcto. Faltan sólo 30 segundos para entrar al aire.
Hoy su público no lo mirará de cerca. Estará en la cama, el sofá, la cocina, quizá jugando con el perro en el jardín. Pero todos ellos, se alistan a participar usando su teléfono móvil. Será un concierto a través de la red social Instagram.
A 35 kilómetros de distancia, Alonso, cantante del Grupo Talawa, del mismo género musical, hace un ensayo con los chicos y seleccionan con mucho cuidado el repertorio. Él sabe que la lista de canciones puede cambiar con poca antelación, pues sus fans van a pedir sus canciones preferidas y el público siempre tiene la razón.
La sala de la casa es pequeña, pero es lo único disponible en estos tiempos de distancia física. Pide la atención del resto de la banda y repasan los mensajes que recibieron días antes de la ONU y el Ministerio de Salud.
En 45 minutos Julio les dará el pase y seguirán el concierto virtual.
Julio Nájera y Talawa ya tienen experiencia trabajando con Naciones Unidas. Julio compuso la canción País Hermandad, un canto al que se sumaron decenas de artistas costarricenses para promover la inclusión social, el respeto por los derechos humanos y la no discriminación. El Grupo Talawa produjo un documental y hasta un libro infantil con la Organización Internacional de las Migraciones para contar su experiencia migratoria y hacer un llamado contra el tráfico de personas.
Así como ellos, más de 50 artistas de Costa Rica se están uniendo a las Naciones Unidas para llevar esperanza y llamar a la acción contra la pandemia de la COVID-19. Esta iniciativa busca generar conciencia y cambios en uno de los sectores de la población más difíciles de alcanzar, pues muchos de quienes lo integran no ven las conferencias de prensa de Presidencia, no leen el periódico, tampoco tienen Facebook y las autoridades han indicado que están menos dispuestos a seguir las normas de higiene y seguridad para contener los contagios: se trata de las personas jóvenes. Muchos de ellos creen erróneamente que “la COVID-19 no les afecta”.
Es por ello por lo que Julio repite con insistencia: “Compas, estos días nos toca quedarnos en casa. A lavarnos las manos seguido y nada de besitos y abrazos”.
Alonso de Talawa también replica: “En este momento la distancia es solidaridad. Hagamos caso a todas las medidas que nos ha dicho el Ministerio de Salud. Guardemos dos metros con respeto a las demás personas y si vamos a estornudar o toser, lo hacemos en el antebrazo”.
Llegar a los jóvenes a través de las artes
Para Daniel Salas, Ministro de Salud y líder de la respuesta de Costa Rica a la COVID-19, esta es una de esas iniciativas clave para trabajar con las poblaciones más jóvenes y a las que es más difícil llegar para las autoridades. “Por medio de artistas estamos logrando expandir el mensaje y asegurar que las recomendaciones principales como lavado de manos, la forma correcta de toser y estornudar, el distanciamiento social y la importancia de mantenerse en casa, sean escuchadas”.
El músico costarricense Sebas Guillem comenzó esta acción, que se transformó en el movimiento #SOLOSPEROJUNTOS (#AloneButTogether) que las agencias de las Naciones Unidas que trabajan en salud, trabajo, cultura y educación apoyaron firmemente, junto con la presidencia y el ministerio de salud. El movimiento tiene como objetivo aumentar la esperanza, proporcionar educación cultural y compartir directrices clave sobre los esfuerzos nacionales para detener la rápida propagación de COVID-19.
“Es maravilloso que el Gobierno, las agencias de la ONU y la Unión Europea estén apoyando la iniciativa, así como también que más artistas se quieran involucrar. Hay que unirnos como país para luchar contra este virus. La participación de la ONU ha resultado fundamental para hacer crecer la iniciativa y convertirla, además de entretenimiento, en un espacio de educación y cambio social”, destaca Sebas Guillem.
Música que salva vidas
Alice Shackelford, coordinadora residente de las Naciones Unidas en Costa Rica, destaca que en las dos primeras fechas de conciertos, miles de jóvenes se han deleitado con buena música en sus hogares pero también han recibido información clave, guías para enfrentar la pandemia y consejos de los artistas que admiran. Sin duda, esto ayudó a posicionar mensajes que de otra manera la gente joven no hubiese captado.
“Tenemos que usar todas las formas posibles para llevar el mensaje de la esperanza y la seguridad. Está muy claro que la música además de entretenimiento puede llevar educación y salvar vidas”, asegura Shackelford.
Esther Kuisch Laroche, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) para Centroamérica, indicó que con esta iniciativa los artistas llegarán a públicos más jóvenes con mensajes positivos y enfocados en detener el avance de la COVID-19.
Además, señala que “la cultura, aún en los momentos más extraordinarios, no debe pasarse por alto. Más bien, debe ser recibida como un medio de respiro, escape y alimento para el alma. El acceso a la cultura y las artes es esencial en estos días de encierro y cuarentena. Nos proporciona momentos de asombro y alegría; nos permite aprender y descubrir cosas nuevas, y es lo que nos une a todos, incluso cuando estamos físicamente separados".
Ya se han celebrado las primeras dos fechas de #SOLOSPEROJUNTOS con música enfocada en la población más joven, pero en los próximos días se ampliará la oferta artística con clases deportivas, más música y actividades para una audiencia más amplia.
“En las próximas semanas vamos a seguir una fuerte estrategia para promover la higiene, las medidas para combatir el coronavirus, pero también vamos a apostar por mensajes para hacer respetar el derecho a la salud de las personas adultas mayores y también la lucha contra la discriminación y xenofobia contra personas migrantes y solicitantes de refugio en Costa Rica”, explica la coordinadora residente de la ONU.
Al 30 de marzo, Costa Rica reporta 330 casos confirmados de COVID-19. Entre los contagiados la mayoría son personas adultas (293), adultas mayores (24) y adolescentes, niñas y niños (13).
La ONU ha indicado que, si bien las personas adultas mayores son las más afectadas, el virus es capaz de infectar y causar severos daños en jóvenes. También se ha señalado que cada infección es una oportunidad de transmisión, y que los jóvenes no son inmunes. Si no se cuidan y se enferman, pueden poner en riesgo a otros miembros más vulnerables de la población.
Publicado originalmente en el sitio web de Noticias de la ONU en español.