Ayuda humanitaria de la ONU a población migrante y refugiada en tiempos del COVID-19
Digamos que se llaman Omar, Mayra y su pequeña Karen. Llegaron al Perú como muchos de sus compatriotas, en busca de un futuro mejor. Nos recuerdan a tantos peruanos que alguna vez emigraron hacia otros países con la misma ilusión.
Poco a poco las cosas parecían mejorar para ellos. Con su esfuerzo y el apoyo de muchos peruanos, empezaron a salir adelante. El trabajo de Omar y Mayra era duro pero reconocido por su calidad. Entre tanto, la pequeña Karen empezó a estudiar con sus nuevos compañeros peruanos. “Lo podremos lograr” – pensaba Omar.
Pero nadie contaba con la COVID-19
Al presentarse la pandemia, el Gobierno peruano organizó la respuesta de inmediato. A través de sus instituciones y registros oficiales, una gran cantidad de peruanos en situación de vulnerabilidad ha podido acceder a la asistencia del Estado así como de distintas organizaciones y de la empresa privada.
Sin embargo, era necesario atender también a miles de familias como la de Omar y Mayra, conformadas por ciudadanos refugiados o migrantes que vivían ya en situación de vulnerabilidad.
Las Naciones Unidas en el Perú, al tiempo de continuar con su trabajo de apoyo al Perú en el contexto del COVID-19 y en estrecha coordinación con el gobierno, organizó la asistencia humanitaria para miles de familias refugiadas y migrantes.
La ONU responde
El Coordinador Residente del Sistema de las Naciones Unidas respondió a la solicitud de la Presidencia del Consejo de Ministros de distribuir alimentos donados por la empresa privada y administrados por el Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI) a 5.000 familias refugiadas y migrantes vulnerables, en su mayoría de Venezuela.
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), con el apoyo del Programa Mundial de Alimentos (WFP) y de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), organizaron la entrega de canastas de alimentos y agua para cubrir las necesidades mínimas en este periodo de emergencia sanitaria. Se integraron en el proceso de distribución, UNICEF, UNESCO y OPS/OMS.
Para todos, en todas partes
El acceso a la salud, educación, alimentación, entre otros derechos, no depende de la ciudadanía ni de una condición migratoria, menos cuando se atraviesa por una emergencia sanitaria.
“Esta es una crisis que llama a la solidaridad y la ONU continuará trabajando por las personas en situación de mayor vulnerabilidad”, señaló Igor Garafulic, Coordinador Residente del Sistema de Naciones Unidas en el Perú.
Producido por: ONU PERÚ. Para ver la crónica fotográfica completa, publicada originalmente visite la página de Exposure de ONU PERÚ.
Entidades de la ONU involucradas en esta iniciativa