Más de 8000 personas migrantes reciben asistencia durante la pandemia en Argentina

A raíz de la declaración de la pandemia por parte de la Organización Mundial de la Salud el 11 de marzo, para prevenir y reducir la diseminación del Covid-19, el gobierno Argentino  dispuso del "Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio" para todo el país desde el 20 de marzo.

El receso en la actividad económica durante el aislamiento impactó en la empleabilidad y en los ingresos de una cifra significativa de ciudadanos argentinos, como también de los migrantes, que constituyen aproximadamente un 5% del total de la población del país, esto implica un estimativo de 2.2 millones de personas.

Según estadísticas de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el sector económicamente activo entre la población migrante asciende a 837.000 personas, entre las cuales hay 71.000 personas migrantes desempleadas. El trabajo no registrado alcanza a 245.000 migrantes asalariados (un 47,2%), mientras 260.000 migrantes (un 26,9%) son trabajadores autónomos. Estos últimos grupos son los que presentan mayor situación de vulnerabilidad, junto a la población migrante que arribó recientemente, que encuentra dificultades para acceder a los programas de protección social de transferencias monetarias establecidos por el Estado, dado que se exige un mínimo de residencia en el país y contar con el documento nacional de identidad. La pobreza afecta al 36% de las personas migrantes en Argentina. Personas del género femenino representan el  52% de esta población migrante.

Ante esta realidad, la OIM en Argentina trabaja junto a las autoridades nacionales, el Sistema de las Naciones Unidas y las organizaciones de la sociedad civil para incorporar la temática migratoria en los planes de respuesta, para actuar ante las necesidades humanitarias de las personas migrantes y para fortalecer la prevención y el control de la COVID-19 en los puntos de entrada al país, dar apoyo a los sistemas públicos de salud y mitigar el impacto socio-económico de la pandemia sobre la población migrante; todo como parte del abordaje colaborativo.

Desde abril más de 3000 familias de migrantes se vieron beneficiadas hasta el momento en distintas provincias del país al recibir kits con alimentos y elementos de higiene que fueron entregadas en sus domicilios.  

“Junto a una gran red de asociados que tenemos pudimos alcanzar a más de 8000 personas en situación de vulnerabilidad a través de la distribución de kits alimentarios, de kits de higiene, de apoyo a comedores comunitarios y de transferencias monetarias que ayuden a apalear esta situación de extrema necesidad que atraviesa la comunidad migrante en Argentina. Todas estas acciones de respuesta y emergencia se focalizaron en salvar vidas, en dar alivio previniendo más contagios y la expansión del virus.” aseguró Gabriela Fernández, Jefa de Oficina de OIM Argentin.

Desde abril se han realizado una serie de acciones, en alianza con la Cruz Roja Argentina, la Comisión Católica Argentina para las Migraciones, el Servicio Jesuita a Migrantes, AMUMRA (siglas en español de “Asociación de mujeres migrantes y refugiadas”), ASOVN (Sociedad Americana de Enfermeras Registradas en Oftalmología), Alianza por Venezuela, PROVEAR (representación nacional del Programa de Acción de Educación en Derechos Humanos) y 100% Diversidad (asociación civil “100% Diversidad y Derechos”), y con el apoyo de la Unión Europea, la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de Estados Unidos y el Banco Mundial.

En alianza ha permitido: El intercambio y  generación de información sobre impacto del virus en la población migrante; la producción de 5.000 copias en inglés, español y francés de materiales informativos sobre prevención de la COVID para personas migrantes en asociación con la Cruz Roja; la entrega de 2 módulos sanitarios, elementos de prevención y de detección (termómetros infrarrojo, alcohol en gel, barbijos y guantes de protección) para facilitar la aplicación de protocolos sanitarios en los puntos fronterizos Tancredo Neves y Aguas Blancas-Bermejo; y la donación de 50 termómetros infrarrojos y material sanitario de protección a la Dirección Nacional de Migraciones (DNM) para fortalecer la detección de casos de COVID en los pasos fronterizos habilitados.

Además, durante los meses de junio, julio y agosto, la OIM Argentina, junto con el intituto para la pequeña y mediana empresa, Instituto Pyme, del Banco Ciudad de Buenos Aires, desarrollaron un ciclo de capacitación denominado “Emprendedores Migrantes”. Esta serie de cursos y seminarios virtuales tuvo como objetivo acompañar a la comunidad migrante ante los desafíos que plantea la pandemia provocada por la COVID-19.

“En lo que resta de este año la OIM, como el resto de las agencias de la ONU, se concentrará en la recuperación socio-económica. Esto para la OIM se traduce en facilitar la creación de empleo y medios de vida para que la población migrante recupere su autonomía, tenga acceso a trabajos registrados que no sean precarios y les permita llevar adelante una vida digna,” dijo Gabriela Fernández

Este artículo se publicó originalmente en el sitio web de ONU Argentina el 26 de agosto de 2020.